Ya en casa de José, a las primeras que conocí fue a su hermana Ana y a su madre María Elena, ellas lo llamaron para que viniera a mi encuentro, le pedí me llevará a su taller para hacer algunas fotos, se mostró muy accesible y me abrió las puertas de ese taller donde puede dar rienda suelta a su creatividad, con calador de mano, -Herramienta que usa para perfilar la madera- me fue guiando y mostrando cada paso que da al tallarla.
Mientras trabaja, recuerda que a los 16 años se dio cuenta de lo que quería hacer en el futuro, estudió en una escuela de manualidades y oficios que quedaba a dos cuadras de su casa. En el año 2003, restauró los retablos de la iglesia Santísima Trinidad, en el 2005 trabajó como arqueólogo aficionado en un lugar llamado San Isidro de los Destiladeros, ese mismo año 2005 encontró un abanico metálico decorativo y fue la inspiración a realizar los abanicos en madera que hoy exhibe en su galería -una casona del siglo XVIII-. Bromeando dice, que ese hallazgo fue la manzana de Newton, porque fue un choque de poner el contexto histórico con la artesanía y es ahí, que por primera vez fabrica los abanicos en madera.
En su expresión se nota, que cada vez que va a crear algo, busca un contexto apropiado donde su mente y alma estén alineados. Trabaja con madera reciclada de las casonas antiguas que se van a restaurar, menciona que al cedro hay que tratarlo con delicadeza. Usa la garlopa para quitar piezas grandes y luego con cincel va diseñando delgadas tablillas que luego serán parte de una autentica e inigualable obra de arte.

Tiene tres hijos a los que cría solo y trata en lo posible de ser el mejor ejemplo de tenacidad y perseverancia para ellos, sus ojos se llenan de emoción cuando los menciona, “tienen 14, 10 y 9 años, están orgullosos de mí, de lo que hago, son huérfanos de madre, por eso me esfuerzo para darles lo mejor”.

PD:
José Miguel Cadalso es ebanista y exhibe sus obras de arte en su casa, en la que ha acondicionado una galería, está situada en la calle Fernando Hernández Hecherri 51A, Trinidad, Cuba, a una cuadra de la plaza mayor, es una casona antigua del siglo XVIII, como muchas en el Damero de esa ciudad.
Si quieres contactarlo puedes escribirle a su Whatsapp +53 52947181